Algunas tiernas miradas,
son para el alma, caricias,
rezuman, amor, dulzura,
del corazón son nacidas.
Manifiestan la bondad,
sin palabras transmitida.
Es por esto que esos ojos,
cuando con amor nos miran,
al mirarnos nos seducen,
al mirar ya nos cautivan,
al mirar nos ilusionan,
con sólo mirar, animan.
Otras miradas dan miedo,
reflejan alma vacía,
falta amor, falta ternura,
tememos a quien nos mira.
Nadie da lo que no tiene,
si deseamos la alegría
para que todos disfruten
de un buen rato este día,
pondremos mucha ilusión
y una dulzura exquisita,
sonreiremos al de al lado,
con la más tierna sonrisa,
cargada de sentimientos
que nos brindan tal delicia.
Los gestos son la expresión,
de lo que en el alma anida.
Si al amar se siembra amor,
y con tesón se cultiva,
brotarán hermosas flores,
aún cual rosas, con espinas,
pero desprenden aroma
que enriquece nuestra vida.
Seremos cual sembradores,
siembran de trigo semillas,
sabiendo que entre cizaña,
brotarán ricas espigas.
Siembra amor por este mundo,
al sembrar se multiplica,
no todo será perdido,
crecerán buenas semillas
que a su vez darán el fruto
que el humano necesita.
El amor es flor y fruto,
el amor es alegría,
el amor es todo, todo,
es bondad de Dios nacida.
Es regalo de quien ama
la ternura compartida
y es regalo la mirada
que llena de amor, nos mira.
