Absorto admiro el torbellino de olas,
bello bordado de encaje de espuma,
visible su belleza entre la bruma,
escuchando el rumor de caracolas.
Difícil describir tanta belleza,
incluso para el genio del artista,
ante tanta hermosura a nuestra vista,
enigmas de nuestra naturaleza.
Se ocultan las nieblas cuando oscurece,
hacia arriba, el infinito del cielo,
tras las estrellas está el consuelo
que mi alma busca y creo que merece.
Murmullo del mar, noche estrellada,
alejados de voces sin poesía,
encuentra sosiego esta alma mía,
preludio de la paz tan deseada.
¿ Es en paz, cuando aprecio la hermosura,
o es esta,quien me guía hacia la paz?...
En alma predispuesta y con bondad,
entra luz aunque sea en noche oscura.