Aunque marchita, la flor,
exhala aroma, fragancia,
en ambiente putrefacto,
alegra a quienes pasan.
Quiero ser como las flores,
dar la esencia de mi alma,
los tesoros recibidos,
sembrar en tierra labrada
que germinen y que crezcan
y que den cosecha sana.
El mundo hoy necesita
que florezca la esperanza.
La esperanza que yo tengo,
ser mejor cada mañana.