Estaba ida, ensimismada, soñando...
Soñando empiezo siempre cada día,
soñando despierta, es mi alegría,
disfruto así, lo que vivo anhelando.
Cada instante siento que estoy
deseando,
que reine en el mundo, paz y armonía,
música de angelical melodía.
Mas esto no es real, no está pasando.
¿Pueril ingenuidad?... ¿Bello optimismo?...
¿Hermoso deseo escondido en nuestra alma?...
¡Qué pena! Sin duda es un espejismo.
Hasta en sueños, me llega de las rosas,
suave aroma que siempre nos regalan.
Seamos cual ellas, siempre generosas.