Van llegando los fríos,
es crudo invierno,
en el campo las aguas
se han vuelto hielo.
Son espejos brillantes
del sol reflejo,
lisos, planos arriba,
abajo ensueño
en figuras, relieves,
castillos viejos,
o guirnaldas de flores,
o caramelos.
Si le damos la vuelta,
figura en hielo,
aparece brillante,
como en un cuento.
Fantasía e ilusiones,
bellos momentos,
porque no todo es frío
en el invierno.
Abrigando esperanzas,
alma y cerebro
entre luces y sombras,
veo un lucero,
luz de mi oscura noche,
brillo intenso,
llegáis para ayudarme
en mis deseos,
porque sola no puedo,
sola me pierdo.
Podemos ayudarnos,
no ser luceros,
cada uno daremos
lo que tenemos,
como el barro y el agua
del hielo lecho
y saldrán maravillas
aunque en silencio,
si alguien se beneficia,
olor de cielo.