Dios podía habernos creado
adultos, como a Adán y Eva,
pero optó seguir creando
a madres, buenas maestras,
dando lecciones de amor,
por propia naturaleza.
Ya había hecho a la mujer
y al hombre antes que a ella.
EL, en su infinito amor,
quiere amor en la pareja.
Un amor apasionado,
es lo que a procrear lleva.
Será un amor creativo,
cumpliendo hermosa tarea
colaborando con Dios,
y que por siempre así sea.
Tres en uno por amor,
aunque esto no se comprenda.
Nuestra vida es un enigma
y el CREADOR se la encomienda.
La mujer, ahora es sublime,
en su ser, a un hijo engendra,
lo gesta, luego lo cría
y lo educa, ella es escuela.
Dios Padre le ha confiado,
la más hermosa tarea,
primer cobijo del hombre,
primera sonrisa tierna.
El Creador a la mujer,
con mimo y afecto obsequia,
mientras que dentro en su vientre,
gran misterio el amor vela.
Será ella el receptáculo
que a cada humano proteja.
Unidos hombre y mujer
como Dios estableciera,
juntos con El, en alianza,
es como la vida empieza.
Es un don, un privilegio,
el ser que EL SEÑOR entrega
a la mujer que al amor,
por amor está dispuesta.
¡Qué maravilla escondida,
sin que nadie lo supiera!
Lleva en su entraña a un ser
que cambiará su existencia.
Así comienza la vida,
el primer cobijo es ella,
allí en sigilo y silencio,
pobres y ricos, comienzan.
Las madres son un enigma,
que nadie a explicar acierta.
Nace amor, antes que el hijo,
siempre amando hasta que muera.
Nacida para el amor,
la mujer es un poema,
sentimientos y ternura,
amor creativo y belleza.
Amor y dedicación,
al hijo que al mundo llega.
Amor, cariño y ternura,
cuidados, delicadeza.
Amor con amor se enseña,
ella es la mejor maestra.
Amor valiente, heroico,
de los hijos en defensa.
Amor mostrando ingeniosa,
de la vida, recta senda.
Amor que lucha y trabaja,
amor que vela y que sueña.
Amor en torno a ese hijo,
aunque mire alguna estrella.
Amor, amor, siempre amor,
amando, mujer perfecta.
Demos gracias al Creador,
por tantas madres tan buenas
que a veces con sacrificios,
lo que es el amor, enseñan.
Otras madres sin gestar,
aman como madres tiernas,
son madres aún sin parir,
madres amorosas, bellas.
Pidamos a Dios perdón
por quien al amor se niega
y no acoge en su vivir,
a una criatura indefensa
porque ella no sabe amar,
comete una cruel vileza.
Las semillas germinadas,
tras hermosa sementera,
han de nacer y dar fruto,
como en la madre tierra.
Tu no eres digna, mujer
si al engendrado no aceptas.
Aunque le niegues nacer,
es tu hijo aunque no quieras.
Pobre e inconsciente mujer,
mujer pobre sin conciencia.
Madre, milagro y misterio,
junto a DIOS y al hombre, creas
lo más hermoso del mundo,
así nuestra vida empieza.
Eres tu el mejor regazo
para acoger a quien llega
reclamando amor, cuidados
y tu a ambas cosas te entregas.
Angel custodio en la vida,
cuya cercanía consuela.
Madre, palabra muy dulce,
Madre, palabra muy bella,
madre, regalo que Dios,
a los humanos obsequia
para andar por este mundo,
amando como ella enseña.
Gracias madres, sois un don
de Dios Padre y Providencia.