Mientras tranquila paseaba,
soñaba, soñaba, soñaba.
Que gusto soñar despierta,
soñar lo que pide el alma,
si en el mundo es primavera,
y nadie estropea la calma.
Sentir la paz interior
que con la verdad se alcanza
y nace tierna bondad,
muy dentro bien cultivada.
Aquí en entorno florido,
quedan pobres las palabras,
los mas nobles sentimientos
dulcemente germinaban
y crecían hacia dentro,
así nadie los maltrata.
Son deliciosos momentos
que la vida nos regala,
cuna de amor y belleza,
a esto nada se le iguala.
En este precioso entorno,
con un alma enamorada,
acuno unos lindos sueños,
como linda es la mañana.
Sueños preñados de esencias
de lo que en verdad deseaba,
que nacen con la ilusión
de sobrevolar montañas
y tocar algo sublime,
algo del cielo antesala.
El día comienza radiante
como lo anunciaba el alba,
todo ahora es armonía,
todo sosiego y calma.
Este marco incomparable,
donde el sentimiento manda,
la poesía da su aroma
que al ambiente perfumaba.
Amor, poesía, primavera,
belleza, armonía, calma
¿Qué más se puede desear
en bucólica mañana?
La primavera es hermosa
lindas flores la engalanan,
dentro reviven los sueños,
ilusiones adornadas
que anhelan volar muy alto,
porque alto vuela quien ama.
Dejo en libertad los sueños,
-nunca hay que cortar las alas-
volando hacia las alturas,
notaremos que nos falta
una fuerza misteriosa
con la que el sueño se alcanza.
Con un gran amor y fe ,
además de la esperanza,
la fortaleza es completa,
animarán cuerpo y alma.
Todo esto es maravilloso
en deliciosa mañana,
con la conciencia tranquila,
inigualable ventaja.
¡Que bello es poder soñar
entre las flores y en calma,
soñando con lo que anhelas
y la sonrisa en la cara,
la cara que es el reflejo
de lo que siente nuestra alma.
El alma está satisfecha
y a su entorno luz regala,
porque el amor es así,
ilumina a quienes ama
En bucólica mañana,
entre las flores, soñaba.
