Junto al mar

   Siento nostalgia, añoranza,
tu paz mi alma serena.
Quiero acercarme a tu orilla
con la ilusión de quien sueña,
mirando tranquila al mar,
dando la espalda a esta tierra
con cierto olor a podrido
pues  lleva cieno en las venas.

  Pasear mirando al mar,
mientras su horizonte oteas,
aislada un poco del ruido,
silente el alma recreas
y vuela al lugar de ensueño,
donde vuelan los que sueñan,
siguiendo esas locas rutas
de aventurero o poeta.

   Vengo buscando esa paz
que a veces el mundo niega. 
Hoy el mar es mi refugio,
voy a escuchar que me cuenta.

   Esas encrespadas olas
con embrujo de sirena,
encaje blanco, ondulado
de fina y fugaz belleza
que se estrellan en las rocas
o a la playa abrazan, besan,
cautivan con sus encantos
y ensimismada me dejan,
evadiéndome  de un mundo
malvado que nadie  anhela.

   Quédate a mi lado, aquí,
todo lo que ves te eleva:
El murmullo de las olas,
el ritmo de las mareas,
y el abrazo de las aguas
a la siempre fiel arena
que les brinda su regazo
porque descansen serenas.
Las olas que van y vienen,
jugueteando  coquetean
fundiéndose en un abrazo,
es eso, no se golpean.
Ya no son dos, solo una 
al unirse cual desean.
Las dos han formado lazo
cuando entre su espuma juegan,
cuando danzan a su aire
con el sol o con estrellas,
o con la celosa luna
que sobre sus aguas riela.

   ¡Cuantas cosas nos diría
si escribir el mar supiera!...
Mas solo sabe cantar...
¿O es cantan las sirenas?...
Sirenas o acaso el eco
de canciones marineras
que entonan hombres de mar,
al acabar la faena.
Tenue el sonido que escucho, 
suave, muy suave me llega.
¿Será un orfeón de peces
o el llanto de las ballenas?...
¿Tal vez solloza un pirata
que no halló la paz eterna?
¿Acaso ánimas de gentes 
arrastradas por galernas?
¿Quizá el gemido de un reo
de las antiguas galeras?
¿O el fuerte golpe de olas
al estrellarse en las piedras?
¿Suena a oración de un marino
en largas noches de vela,
pensando en sus amores
a la luz de las estrellas?
¿Es canto fúnebre y débil
de una agonía que llega
a su flora y a su fauna
que esta sociedad condena?...

   ¡Cuántas cosas el nos dice,
pero nadie tiene en cuenta!

   ¿Cuál puede ser su mensaje?....
Yo descifrarle quisiera,
mas sigue siendo un enigma 
sepultado entre la arena.
Por eso vengo a soñar
aunque el sueño sea quimera.
Realidad y fantasías
en mi mente aquí se mezclan.
¿Acaso no es eso el sueño,
aunque no lo vea quien sueña?....

   Yo siento que aquí me atrae 
una misteriosa fuerza
y no puedo precisar 
si es ilusa o verdadera.

   ¿Por qué, por qué me pregunto?....
El mar no me da respuestas,
me invita a seguir soñando
inspirada en su belleza.
¡Cuántos secretos oculta!
¡Cuántos arcanos encierra!....
Hoy parece que me llama,
voy a escuchar que me cuenta.

   Yo  hablo bravío y en calma, 
hablo de  muchas maneras. 
Hoy te traigo mil historias
y todas, todas, muy ciertas.
Yo soy cementerio y vida,
yo soy sosiego y soy fuerza,
yo soy placidez, soy furia,
yo soy paz y también guerra,
yo soy confusión y  luz,
yo soy música que eleva,
yo  soy dinamismo y paz,
yo soy poesía y ciencia,
yo soy escultor perfecto,
pues mis aguas bien modelan,
yo inspiro ciencia y arte,
yo soy musa y soy poema.
Yo soy brisa que acaricia
o vendaval y galerna;
Yo soy quien grita en silencio
y mi voz siempre es sincera.
A todos doy mi mensaje,
mas muy pocos lo interpretan.

   No sé si es sueño o es verdad,
si es realidad o quimera,
que la mar nos pide auxilio
para que en común tarea,
librarle  de los  piratas
que ahora viven en la tierra.
Escuchemos sus lamentos 
y comprendamos sus quejas.

   Muchos roban mis tesoros
y mis aguas envenenan,
por egoísmo, caprichos,
cruel poder o riquezas.
Ellos no saben soñar,
no escriben ningún  poema.
Ellos no rezan ni cantan
a la luz de las estrellas.
Ellos matan sin piedad
a pacíficas ballenas.
Ellos no ríen con los niños
cuando con mis olas juegan.
Ellos están seducidos
por cánticos de sirenas.
Ellos ingratos no piensan
que acaso mi fauna muera.

   Perdónanos mar querido,
el egoísmo nos ciega. 
A poetas no escuchamos,
pero tampoco a la ciencia..​
Regálanos tu sosiego,
ofrécenos tus bellezas, 
tal vez escuchen tus voces
y remedien ya tus quejas..

   Buscando en ti mi consuelo, 
he compartido tus penas.
Eso es ser buenos amigos,
con una amistad sincera.
Gracias mar por los regalos
que cada día nos obsequias.
Yo sólo puedo ofrecerte
este sencillo poema.