¡Levanta!

   Amanece, viene el día,
primeras luces del alba,
la aurora nos da alegría
para empezar la mañana.
Lo esperábamos con gozo,
la noche fue fría y larga,
ahora los rayos de sol,
su resplandor nos regalan.

   Cuando la noche es muy negra
y de luz no llega nada,
hemos de ser positivos, 
" todo llega y todo pasa".
Pasarán estas tinieblas
me susurra la esperanza.
Tras estas oscuras sombras,
llegará la luz muy clara.

   Aunque estemos en invierno,
con noches gélidas, largas,
el sol es fiel a su cita,
nos despierta en  el alba,
con su derroche de luz,
animando cuerpo y alma.
Aparece poco a poco,
acaricia nuestra cara,
pone un toque de optimismo
con la fuerza necesaria
para cotidianas luchas,
si cada día nos atacan.
Sabe que hemos descansado,
nos despierta sin palabras
y entre mimos luminosos,
dice muy suave... ¡Levanta!

   No te pierdas el obsequio,
asómate a la ventana
 y goza de esta hermosura
que cada día nos regalan.