El egoísmo es ciego

La gaviota, es un ave preciosa. Posada en las rocas, caminando o volando, es poesía en movimiento.Pero aunque sea para sobrevivir, es cruel y voraz. Nos sirve como metáfora. El aspecto de las riquezas es  agradable, pero a veces oculta lágrimas y sangre, derramadas por su culpa.

El egoísmo es ciego 

   Paloma blanca manchada,
volando en raudo vuelo,
la gaviota está más alta
y suelta sus excrementos.
Ha visto a un pajarito
y quiere sea su alimento
El que está arriba se olvida
de quien camina en el suelo.

   La injusticia es la mentira,
corrupción, estercolero
soltando fétido olor
con ciertos aires de infierno.
Este cochino egoísmo,
hace daño aún sin quererlo.
Heridas agangrenadas,
causan  inocentes muertos.
Ese olor a podredumbre,
como en ningún otro tiempo,
se extiende por nuestra España,
dando dolor, sufrimientos .

   Tienen mucho y quieren más,
su egoísmo es ciego, ciego.
No importan otras personas,
primero ellos y sólo ellos.
¡Qué pena! ¿qué soñarán
de dormidos y despiertos?
¿Todo se habrá vuelto oro,
como ocurría en aquel cuento?

   Lo que estos llevan de más, 
otros lo tienen de menos,
se condena a inocentes...
¡Protestemos, no hay derecho!
Seamos voz  de los sin voz,
seamos por amor, voceros.
Los ladrones son parásitos
que hacen daño en otros cuerpos.
¡Qué pobres, siguen robando,
dinero, mucho dinero!