Madre; regalo de Dios

   Arrullando está   la madre, 
muy  serena,
el niño es noche, no  duerme, 
madre vela,
entonando  mil nanitas,
tal vez  duerma.

   Nuestro muy lindo ángel,
ahora duerme y sueña,
sonríe dormido,
esta es la gran prueba,
feliz es el niño,
cual la madre anhela,,
así lo pide a Dios,
así lo desea.

   Duérmete ya  mi amor,
duérmete pronto   y  sueña,
que velamos el sueño,
tu madre que está atenta,
la luna los luceros
y millones de  estrella.
Todos te quieren mucho,
tu carita hoy besan
y te cantan nanitas,
melodías selectas

   Nuestro niño se durmió,
parece hermosa azucena.
La madre feliz sonríe,
mientras al hijo contempla.
Es su tesoro, su vida,
es de su amor recompensa,
es la ilusión que soñaba,
cuando se ofrecía dispuesta
a ser madre, si Dios quiere,
y el amor de su pareja. 
Tres en uno por amor,
esta es la mejor respuesta.

   Duerme ya el angelito ,
madre reza
y esta noche en nuestro mar,
luna riela.
Todos queremos  tener,
madre buena,
velándonos noche y día,
sol y estrellas.
Son las madres de este  mundo 
flores  bellas,
tierna y hermosa poesía,
dulce poema.
Regalo de Dios al mundo,
linda ofrenda!
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En este poema, he dejado volar la fantasía en libertad. No salió una bella creación, es un ensayo a modo de prueba. Son cinco estrofas y consecutivamente,  van aumentando en dos el número de versos, 6, 8, 10, 12 ,14.La primera y la última, son estrofas al estilo de pié quebrado. La segunda, sus versos son hexasílabos  con rima asonante en los pares, al igual que todo el poema. La tercera son versos heptasílabos, La cuarta, octosílabos. Me parece un pequeño lío, por eso lo advierto. 
Es una mezcla sin ninguna ambición literaria, sólo, algo diferente. Con este poema, no pretendo nada, ya sé que es un tanto heterodoxo, según la métrica  ortodoxa. Un intento de experimento, ja ja ja .Pero sí es cierto que las madres  - como los padres – se sacrifican, porque saben amar.