Los susurros del viento
en la enramada,
son ecos de lamentos
si estoy cansada,
alegres aleluyas
en la alborada,
nostalgias en la noche
con añoranzas,
caricias a mi mente
necesitada,
rumores muy lejanos
de remembranzas,
y preludio del sueño
que yo soñaba,
con perennes recuerdos
de lo que se ama.
Si el sonido es el
mismo...
¿Cómo es que cambia?...
El murmullo no cambia,
cambia mi alma
y trae los pensamientos
que yo deseaba,
reminiscencias y sueños
como anhelaba.
Los rumores del viento
en la enramada,
son obsequios privados
que nos regala,
evocando vivencias
nunca olvidadas,
o soñando ideales
que aquí no alcanza.
Al menos un momentos
los disfrutaba.
