Felicidad... en la meta

   Voy vagando por la vida,
por tortuoso sendero
que siempre acaba llevándome
a un valle de sufrimientos.
Esta ruta yo la elijo,
porque libertad si tengo.
Quiero un camino de rosas,
en las espinas no pienso,
pero como van unidas,
las rosas en breve tiempo
mueren secas o podridas,
de las espinas me quejo.

   Pude escoger un camino,
tal vez no tan placentero,
pero que lleva a la meta 
por el camino más recto.
Habrá espinas, habrá abrojos,
habrá pedruscos molestos,
mas con ellos ya contaba,
superarlos es mi reto.
No me duele el sacrificio,
estoy dispuesta al esfuerzo,
por eso no habrá sorpresa
aunque encuentre sufrimiento.

   Buscamos felicidad
de espejismos los reflejos,
no la hallaremos completa
en este pobre universo.
Llegan migajas de ella 
a lo largo del trayecto.

   La felicidad es flor
que a orillas de los senderos,
crece entre la maleza
como preludio del cielo.

   Todo es muy fugaz y efímero,
aspiramos a lo eterno, 
No es vano sueño, utopía,
es fiable nuestro deseo.
Todo es nada en este mundo,
yo en el futuro espero
que alcancemos plena dicha,
de todo humano, el anhelo.